viernes, agosto 22, 2008

Amanece, que no es poco



Sí, estamos un poco perros en verano a la hora de actualizar el blog pero es que el calor no deja muchas ganas para hacer nada y lo que menos le apetece a uno después de tirarse medio día currando es sentarse de nuevo delante del ordenador. Así que con algo de retraso sobre la fecha en la que se produjo esta noticia me hago de eco de ella por tratarse de un aniversario, para mí, muy señalado.

La semana pasada se celebró el II Encuentro Surrealista en el pueblo manchedo de Molinicos, que tiene como uno de los acontecimientos notables de su historia el haber sido escenario del rodaje de la película "Amanece, que no es poco". Se cumplen 20 años del rodaje de esta película escrita y dirigida por José Luis Cuerda y que es, sin duda alguna, mi película favorita de la historia del cine español.

Si tuviera que explicar de qué va no sabría qué decir. Es una historia que va de... cuenta la historia de... Es un pueblo en el que... Nada, que no sé cómo hacerlo. Pero os recomiendo verla. Para mí es en el cine lo que Dalí en la pintura o El Niño Gusano en la música. Y no paras de reírte en toda la película... bueno, si te gusta el humor surrealista.

Un padre (Luis Ciges) y su hijo (Antonio Resines) van a visitar el pueblo porque se lo ha recomendado Pepe y ese es el hilo argumental de la película.

Para continuar las celebraciones de esta efeméride, la décima edición del Festival de Cine de Albacete, Abycine, que se celebrará del 26 de septiembre al 3 de octubre, se embarcará en la producción de un cortometraje, revisitando la película y sus personajes, con la colaboración del equipo del programa de La 2 “Muchachada Nui”, seguidores del estilo y filosofía de la película de José Luis Cuerda.

Os dejo algunos vídeos de la peli.

El examen de ingles



Me cago en todos tus muertos



El plagio a Faulkner



Un hombre en la cama



Luis Ciges

domingo, agosto 17, 2008

Jugándose el tipo



Esta misma semana coméntabamos los riesgos que a veces conlleva salir a un escenario a tocar, al hilo de la aparatosa caída sufrida por el cantante de Lagartija Nick, y parece que este verano nos sigue dando la razón en forma de algún susto que otro.

En esta ocasión, y de forma parecida a como sucediera en la última jornada del FIB de 1997, conocido como el del diluvio, los sufridores han sido Facto Delafé y las Flores Azules: durante un concierto en San Sebastián un golpe de aire fue el culpable de que el escenario se desmoronara y se cargara parte del equipo de los catalanes, estando además a punto de costarles algo más serio. Tremendo susto para el trío y también para los allí presentes, como se puede apreciar en el vídeo.

Como resultado, al igual que les pasara a Lagartija Nick, tampoco han podido participar este fin de semana en el festival Sonorama de Aranda de Duero. Un festival al que nos referiremos en breve en este blog.

martes, agosto 12, 2008

Salto al vacío


Quien más quien menos ha fantaseado alguna vez con convertirse en estrella del rock, pensando en los placeres variados que dicho estatus suele conllevar. Pero seguramente nadie se ha planteado que el acto de subirse a un escenario también puede conllevar riesgos variopintos.

Los peligros acechan bajo mil formas: puedes estar a punto de morir electrocutado (como le sucedió a Raphael durante una actuación en Barcelona tras pisar un cable), el público puede recibirte o despedirte a botellazo limpio (en alguna de éstas se han visto por ejemplo Héroes del Silencio, con pelea incluida a continuación, o Sidonie en la extinta sala Agualung, donde Marc recibió un doloroso impacto en la cara) o practicar el famoso salto al público con resultados desastrosos (recuerdo al cantante de los británicos Arkarna, de los que nunca más se supo, no siendo recogido como esperaba durante el FIB de 1997).

Pues bien, esta última modalidad le ha costado bastante cara a Antonio Arias, vocalista de Lagartija Nick. Tanto que a consecuencia del trompazo que se ha pegado en un reciente concierto, la banda se ha visto obligada a suspender sus próximas citas, como las del Sonorama o Nocturama. Desde aquí le deseamos una pronta recuperación. Y es que la vida del artista no está exenta de sus riesgos.